PEÑA MAYOR DESDE VELILLA DEL RÍO CARRIÓN

 

DISTANCIA: 10'8 kilómetros

TIEMPO: 4 horas y 57 minutos (3h22' en movimiento)

DESNIVEL: +859m

Nos acercamos a la Montaña Palentina para realizar la subida a la Peña Mayor desde Velilla del Río Carrión. Concretamente desde la zona de La Reana y las Fuentes Tamáricas.

Pensábamos desayunar en el propio parque, pero el día no invitaba mucho, nublado y fresco, sobre 7º, y nos quedamos en el coche.

Tras el desayuno, nos pusimos el calzado de montaña y comenzamos la ruta, sobre las 10 de la mañana.

Echamos un primer vistazo al parque de las Fuentes Tamáricas y al horno de cal que hay a su espalda. Ya empezamos a ver los dos miradores que tiene Velilla, con espectaculares vistas a Velilla y al valle. Y desde el principio el desnivel hace que la ropa de abrigo empiece a sobrar y toque quitarse parte de ella.

Tras los dos miradores de la Reana, y tras pasar la Cuevona dejándola a mano derecha, iniciamos la subida hacia la Cruz de Velilla. Hay que decir que la ruta en general no está señalizada como tal. Sí que está hitada en según qué zonas, pero es obligatorio llevar el track para no verse metido en algún lío del que no poder salir.

Al llegar a la Cruz, fotos de rigor pero las vistas bajaban de nota por el día nublado que hacía.

Tras la Cruz, un breve descanso de terreno llano y pedregoso y a por el segundo objetivo del día, Peña Lugar y sus antenas. Grandes vistas al valle, Peña Lampa y por detrás la montaña leonesa, al fondo.

Continuamos hacia la cantera que se ve al Este, pero en la bajada nos desviamos antes de llegar a una pista pedregosa que se aprecia para afrontar la dura subida inicial atravesando el collado.

Empezamos el ascenso por sendero entre encina y roca, para según vamos subiendo de cota, quedarnos más con piedra que con encina. El tiempo empeora, el aire empieza a soplar, y la subida se empina de lo lindo.Para hacer menos dura la subida de hito en hito, muy vertical, vamos buscando un camino imaginario haciendo zetas para aliviar el esfuerzo.Y ojo con la envergadura de las aves que nos sobrevuelan, da miedito.

Llegamos a un llano. De no haber niebla, veríamos el hitón que hay más abajo de la cumbre, pero hoy no es el día. Y tras ese pequeño descanso de menos de medio kilómetro, en el que más que llanear se sube con una pendiente leve, afrontamos la segunda parte de la subida.

Es aquí donde decidimos ponernos otra vez la ropa de abrigo porque el aire frío creemos que no va a invitar a parar mucho en la cima. Me voy guiando por el desnivel acumulado y veo que no debe faltar mucho, como doscientos metros lineales.

Último esfuerzo y llegamos al buzón cimero. Vistas al Norte nulas, sólo niebla. Alguna foto y a descender. Alcanzamos la cima en poco más de dos horas.

En el descenso se aprecian los hitos, una bajada de piedra suelta en el que hay que llevar cuidado. Como siempre la ayuda de los palos nos da confianza y mejora los apoyos.

Tras casi dos kilómetros de descenso encontramos un buen lugar abrigados del viento y con algún ramalazo de sol y decidimos hacer la comida grande de la ruta. Bocadillos, aperitivos, fruta e hidratación.Veinte minutillos y a seguir con el descenso.

Tras atravesar una abandonada cantera, decidimos dejar el track que llevábamos para adentrarnos más al norte, por el pinar, e ir buscando caminos de descenso sin tanta piedra suelta y roca. Quitando alguna zona de campo a través, el resto es llevadero y vamos a dar casi al mismo punto que si hubiéramos bajado por la senda que llevaba a la derecha una canaleta impresionante.

Tras atravesar el Poblado de Compuerto, claramente vacacional, cruzamos la carretera, a diferencia del track original, para regresar a Velilla por una pista de arena muy llevadera y bonita, con grandes casas a los lados y prados verdes que da gusto admirar.

Y nos fijamos que esta parte oeste de la montaña es más verde de lo que nosotros anduvimos, o eso aparenciaba.

Y el rebaño en lo alto de la montaña no tiene precio, qué manera de ordenarse en filas, filas perfectas, para pasar algún paso con cierto peligro. Admirables.

Pasamos por el centro del pueblo, bonita Plaza Mayor, y seguimos hacia el coche donde tras dejar el material, aprovechamos a visitar más detenidamente las Fuentes Tamáricas.

Ruta exigente, con ciertas zonas comprometidas en las que poner los cinco sentidos es innegociable. Como dije anteriormente, track obligatorio para seguirlo.

Y lástima que el día no terminó de acompañar para tener vistas de 10.

Sobre la dificultad de la ruta, y siguiendo el índice IBP INDEX de medición de esfuerzo humano, en función de nuestro track obtenido, decir que tiene una valoración de 90 IBP INDEX, que traducido en datos es lo siguiente:

Aquí la ruta en Wikiloc.

Hasta otra vez que nos calcemos las botas...